Uno de los problemas más habituales en los turistas durante sus viajes es que sufren robos en el extranjero. Existen destinos más «peligrosos» que otros, también nuestra forma de desenvolvernos en un lugar que no conocemos es vital para evitar situaciones de este tipo. Entérate qué hacer para que no te roben en un viaje.
¿Qué hacer para evitar que te roben?
No hay duda que sufrir un robo es algo horrible en cualquier lugar del mundo. Pero si estamos de vacaciones o de viaje en el extranjero las cosas pueden ser más problemáticas, sobre todo si nos quedamos sin el pasaporte, dinero o tarjetas de crédito.
¿Es posible prevenir un robo? No al 100%, eso es verdad, pero sí en un buen porcentaje si tenemos en cuenta ciertos consejos para cuando te vas de viaje:
Busca información sobre el destino
No solo del país o de la ciudad en general, sino de los barrios o zonas que pueden llegar a ser más peligrosos para los turistas o durante la noche. También es bueno que te informes un poco sobre la seguridad del lugar, dónde está la comisaría de policía más cercana o el número para llamar en caso de tener cualquier problema.
Lleva fotocopias de los documentos
Si sabes que no vas a utilizar cierta documentación, como el pasaporte, haz una copia y llévala contigo a donde vayas. El original déjalo en la habitación del hotel (mejor si es en una caja fuerte).
Otra buena idea es escanear las tarjetas, los documentos y las reservas de vuelo y hotel y guardarlas en el correo electrónico. Así en caso de cualquier problema buscas allí la copia.
Anota los datos de la tarjeta
En caso de robo lo primero que debes hacer es comunicarte con la entidad bancaria que la ha emitido para que la desactive. Ten a mano esa información para poder llamar desde cualquier teléfono, sin importar la hora.
Prefiere hoteles con caja de seguridad
Muchas habitaciones cuentan con este servicio. Si bien podemos no prestarle atención a la caja de seguridad, es muy importante preguntar si la tienen. Algunos hoteles, a su vez, pueden ofrecer una caja para guardar objetos de valor en la recepción. En cualquiera de los casos, puedes dejar la documentación, dinero en efectivo o tarjetas de crédito que no utilices.
Lleva poco dinero en efectivo
Es verdad que en muchos destinos se emplea más la tarjeta de crédito, pero ciertas compras debemos hacerlas sí o sí en efectivo (como el transporte, la comida callejera, etc.). Lleva un poco de dinero para ciertos gastos y lo demás déjalo en el hotel. Si esa idea no te agrada demasiado, puedes colocar una especie de ‘canguro’ o cinto que se lleva dentro de la ropa para poner lo más importante.
Pon bolsos y mochilas «a la vista»
Esto incluye varios aspectos. En primer lugar, cuando estás caminando por la calle no cometas el error de dejar el bolso o mochila en tu espalda. En seguida aprovecharán para quitarte algo de un bolsillo exterior sin que te des cuenta. Mejor si siempre lo llevas por adelante.
También es necesario que cuando estés comiendo en un restaurante, esperando el tren en una estación o haciendo un picnic frente a un parque mantengas a la vista tus pertenencias.
Presta atención a zonas pobladas y despobladas
A veces consideramos que en el centro de una ciudad no sufriremos un robo porque hay mucha gente. O pensamos que en calles poco frecuentadas no habrá nadie para quitarnos el bolso. Sin embargo, no te fíes de ninguna de estas afirmaciones. No olvides que al estar en el extranjero puedes ser blanco de mayores hurtos que un residente.
No aparentes ser turista
Se suele relacionar a los viajeros con personas adineradas. ¡Aunque esto no sea verdad! Si un ladrón ve en la calle a alguien con un mapa en la mano, con una cámara de fotos colgando de su cuello o con ropa típica de turista, sabrá que es un blanco perfecto para cometer sus fechorías (engaños, robos, etc.).
Fuente: www.miviaje.com
